lunes, 19 de enero de 2009

Treinta años de nada


El próximo miércoles 21 de enero, a las 20 horas, se presenta en el Salón de actos de Cajasur, y con la presencia de Julio Anguita, José Calvo, José Antonio Nieto, Manuel Pimentel y su autor, el libro Treinta años de nada. Con este sugestivo título, y bajo el subtítulo "Anatomía del Régimen andaluz o Radiografía", según la edición, Francisco Rosell, director del diario El Mundo de Andalucía, realiza un exahustivo recorrido por los treinta años de gobierno socialista en Andalucía de los cuales dieciocho lo han sido bajo el mandato de Manuel Chaves. El libro de Rosell es muy crítico con esta etapa de la reciente historia andaluza que no duda en calificar como régimen. La instauración de un régimen con sus características propias en el seno del Estado sólo es posible a partir del deterioro de la democracia en un determinado territorio y lo favorece, entre otros fenómenos, el clientelismo, la manipulación ideológica, el control de los medios de comunicación, la excesiva dependencia de la administración, la institucionalización del partido gobernante que invade amplias esferas de la sociedad civil, el desastre educativo que conduce a la servidumbre y la pasividad de amplias capas de una sociedad anestesiada ante los abusos del poder. Según Francisco Rosell, todas estos requisitos, que también podemos apreciar en los regímenes nacionalistas en el País Vasco y Cataluña, son definitorios del régimen andaluz. El de Rosell es un libro necesario, en medio del silencio mediático, muy bien escrito y atrevido. Rosell es de los pocos periodistas independientes que en Andalucía han plantado cara a la hegemonía socialista, y lo ha pagado caro. La libertad de expresión amordazada empieza a ser, por desgracia, una práctica habitual de la política en España, recordemos el caso de Víctor Gago y el PP. La presencia en el acto de un político de centro derecha como José Antonio Nieto y otro de izquierdas como Julio Anguita revelan que la necesidad de la alternancia política en Andalucía no proviene sólo de la sana discrepancia ideológica, sino de una oportuna higiene democrática.

3 comentarios:

JAVIER ORTEGA dijo...

El enorme éxito de ventas que está cosechando el libro desde su todavía reciente aparición demuestra que las tesis de Rosell son compartidas por muchos andaluces.
Y que la necesidad del cambio que apuntas, querido Fernando, es palpable y cada día más imperiosa.
Un fuerte abrazo.

Anónimo dijo...

Pero la oposición tiene que espabilar y contar con gente nueva dispuesta a luchar , y no algunos apoltronados en los despachos y que viven como marqueses . En los pueblos , es posible el cambio político solo con voluntad politica .
Eterno no fue el Imperio Soviético y se derrumbó el Muro de Berlín .

Anónimo dijo...

¿También morirá Chaves en la cama, después de 40 años de Régimen?

Fdo.:Gominolo