lunes, 23 de marzo de 2009

Semana Santa por la Vida


Es lo que faltaba por escuchar. Resulta que la Iglesia Católica no debe expresar públicamente su opinión a favor de la vida porque es meterse en política. Si hay algo que precisamente está al margen de la trifulca política es la vida, su sentido, su defensa y su trascendencia. Entre otras voces críticas, el grupo municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamento de Córdoba considera una provocación el hecho de que las Cofradías luzcan un lazo blanco en un lugar visible a favor de la vida desde su concepción hasta su muerte y en señal de protesta ante una ley de plazos que facilita el aborto, incluso entre las menores de dieciséis años. Quien hace política con la vida no es quien la defiende sino quien la ataca. No hace falta alegar motivos religiosos para reconocer que el derecho a la vida es anterior al propio Estado que por lo tanto sólo debe legislar para protegerla. Ya comenté en una entrada anterior sobre este tema, la miseria moral de una sociedad como la nuestra que mira para otro lado ante la destrucción masiva de vidas humanas. Al igual que la esclavitud en la Edad Antigua o el holocausto judío más recientemente, el aborto es la gran vergüenza de la sociedad de la opulencia. De ahí que considere necesaria y oportuna la campaña de la Iglesia Católica en defensa de la vida, tanto el ingenisoso y muy sugerente cartel del lince como la protesta de las Cofradías ante el proyecto de ley de ampliciación del aborto. Por cierto, una pregunta ¿los medios de la progresía y la señora alcaldesa de Córdoba, Rosa Aguilar, hubieran considerado también una intromisión de la Iglesia en política si los lazos hubiesen sido a favor de la paz frente a la guerra de Irak o contra la pena de muerte o la violencia de género? Quiero recordar aquí el reconocimiento público que tuvo el Papa cuando se pronunció radicalmente contra la intervención norteamericana en Irak. Yo no escuché que nadie considerase una inadmisible intromisión de la Iglesia en cuestiones políticas. Pero, claro, son los sectores más intolerantes de la izquierda los que se permiten dar y repartir licencias de credibilidad y libertad de expresión, creyéndose en posesión de la Verdad cuando permantemente se autoproclaman relativistas. Como dijo el gran escritor vasco, hoy olvidado, Pedro Mourlane a su amigo y también escritor Jacinto Miquelarena cuando éste se iba al exilio, "¡Qué país, Miquelarena, qué país!"


22 comentarios:

Anónimo dijo...

Estimado Fernando: por mí las cofradías pueden ponerse todos los lazos blancos que les dé la gana, ya sea en el paso, la cruz de guía o en la punta del capirote de cada nazareno. Allá cada uno. Lo que sí me llama la atención es que durante los ocho años del aznarato, en los que no se tocó ni una coma de la legislación sobre el aborto, que, como se sabe, ha sido interpretada con laxitud y ha permitido abortar en España prácticamente a toda mujer que lo ha querido, ningún obispo se dignó salir a la calle a protestar ni nadie lució lazos blancos, en fin es la enésima muestra de la tradicional hipocresía de nuestra jerarquía episcopal.
Por cierto estaría bien que la iglesia dijera que se debe hacer con las mujeres que abortan: ¿qué tal un cartel con un obispo arrastrando esposada a una mujer hasta la cárcel? Además deberían cuidar más a quien encargan sus campañas de publicidad, señores obispos ¡el lince de la foto no es ibérico! Los casi cincuenta millones de euros extra que han recaudado este año merced al munífico acuerdo sellado con el meapilas de Zapatero deberían bastar para contratar una agencia de más calidad. Un saludo cordial.

alfonso dijo...

El anterior comentario es mio, se ve que aún no soy un avezado bloguero. Saludos.

Anónimo dijo...

Muy buenas a todos. Aprovecho la entrada de esta semana para incorporarme a la reducida pléyade de participantes en este blog, en el que también colaboran antiguos compañeros míos. Sólo espero que mi inexperiencia no os moleste, cuando, por ejemplo, mande el mismo comentario once veces porque no estaba seguro de qué botón pulsar.
Querido Alfonso: no puedo menos de admirar tu buen ojo venatorio, en verdad el lince de la foto no es ibérico, sino euroasiático (por cierto, un depredador mucho más temible y que también goza de protección medioambiental), pero no esperaba menos de quien simpatiza con un gobierno tan propenso a la caza que algún ministro se ha ido pegando tiros. En cambio, yo soy tan ignorante que, ante la foto de Bermejo y Garzón junto a los cornúpetas abatidos, no pude distinguir, entre cazadores y cazados, a muflones de venados.
En cualquier caso, la manipulación de los obispos no se ha limitado al lince, sino que nos incitan a reprobar el aborto empleando la foto de un niño... que no ha sido abortado. Imagino que te parecerá un desatino tramposo y sentimental.
Es cierto que la iglesia católica no hizo manifestaciones como las de los lazos blancos durante los gobiernos de Aznar... pero tampoco durante los de González ni durante los 4 primeros años de Zapatero. Pero este leonés de Valladolid es tan torpe que ha propiciado la ruptura de un consenso más o menos disimulado al especular sobre la ampliación de la legislación sobre el aborto: o sea, unos políticos con mucho tiempo libre han provocado un conflicto que creen que les puede perjudicar donde antes no había nada. ¡Esos sí que son unos linces, y no el de la foto!

Anónimo dijo...

Saludos de nuevo.
Una vez comprobado que fui capaz de mandar el anterior mensaje, publicarlo y que la red no se cayera por mi impericia, me gustaría seguir.
Amigo Alfonso, pareces reprochar hipocresía a la iglesia católica por esta campaña publicitaria y las manifestaciones de lazos blancos previstas, también para este año. Estarás de acuerdo conmigo en que si hubieran exhibido esta actitud desde el principio no se habría alabado su ortodoxia, sino que se habría censurado su fanatismo retrógrado (con palabras parecidas), y así es muy fácil dar con un reproche.
La iglesia católica (como las protestantes, el judaísmo, el islam y no sé cuántas más civilizaciones, de la alianza o no) siempre ha mantenido el mismo rechazo contra el aborto basándose en un principio absoluto, mientras que el actual gobierno parece dispuesto a cambiar la legislación de modo más o menos cosméticos si cree que le puede resultar rentable. Visto esto, ¿de quién es la hipocresía?
Hablas de los 50 millones de euros extra que ha aportado a la iglesia católica Zapatero (como soy un ignorante, pensé que los aportaba el Estado al que él representa), como si esperases un trato de favor después del desembolso. Aunque yo pienso que este gobierno (y los anteriores de ZP) habita en la indigencia intelectual, ni siquiera yo creo que esperasen ese intercambio de favores al estilo mafioso (te pago a cambio de protección), si bien tú pareces ser de otra opinión. Es lo que tiene ayudar a la SGAE y a los artistas subvencionados, tarde o temprano se acaba creyendo que subvención = sumisión.
Por cierto, que los gobiernos de Zapatero llevan años amenazando con revisar los acuerdos con el Vaticano para evitar situaciones como ésta, pero siguen sin obrar en consecuencia. Pero la iglesia es la hipócrita, sin duda.
Preguntas qué harían los obispos con las mujeres que abortasen fuera de la ley, y yo te invito a pensar qué ha hecho este gobierno, garante último de nuestro derecho, con esas mismas mujeres. En lugar de especular con obispos que conducirán a mujeres esposadas y con la letra escarlata bordada en la ropa, recuerda que bastó con descubrir la clínica del doctor Morín en Barcelona, donde, presuntamente, se venían vulnerando de forma reiterada los supuestos legalizados de aborto, para que el Ministerio de Igualdad se lanzara a especular con la reforma de la ley. A ti te asusta un hipotético futuro, a mí me escandaliza un gobierno que parece legislar con tal de no hacer cumplir la ley, valga la paradoja.
Por último, y debiera haber sido lo principal, sobre la polémica de las cofradías, me parece una actitud razonable exigir dicho compromiso a quienes blasonan de estar en ellas, los cuales, se supone, tienen claro que representa algo distinto de un espectáculo etnográfico o de un ritual social con el que adquirir notoriedad en tu pueblo o ciudad. Para eso ya tenemos bastante con los coros y danzas y con el día del orgullo gay.
Hasta la próxima.

Anónimo dijo...

Querido Miguel: soy Alfonso y mi ojo cinegético no es tal como tampoco el tuyo, ambos nos hacemos eco de lo publicado en la prensa, salvo que ahora seas un nuevo Miguel Delibes, hijo, y trabajes en Doñaña.
Respecto a las simpatías las dejo para mis compañeras de trabajo que me lo agradecen, no sé si a ti Rajoy te agradece las tuyas de alguna manera, lider de un partido donde, por cierto, también se cuentan buenas escopetas. La verdad es que hubiera agradecido, sabida mi afición al gore, un feto sanguinolento a un niño rozagante, hubiera sido más impactante, pero en fin doctores tiene la iglesia, y nunca mejor dicho. Estoy de acuerdo contigo en la torpeza del gobierno en provocar este debate, pero me gustaría que la iglesia se pronunciara de una puñetera vez: si el aborto es un asesinato o en el más benévolo de los casos, un homicidio que digan la pena a aplicar a la mujer que aborte: 10 años, 20 años, quizá cadena perpetua, así todos sabriamos a que atenernos. Pero claro es más fácil tirar la piedra y esconder la mano, además si tan claro lo tienen respecto al tema no deben temer que ningún estúpido progre les llame retrógados, deberían pensar que no insulta quien quiere sino quien puede, pero entonces serían coherentes y no es el caso. Estoy de acuerdo contigo en la cobarde actitud del actual gobierno que no se atreve a meterle mano a los privilegios sin cuento que consagra a favor de la iglesia el actual concordato. Por cierto que según se deduce de la prensa local de hoy en el tema de los lazos hay recogida de velas, será porque Sevilla no lo secunda. Por último agradecerte que hayas salido de tu torre de marfil para bajar a la arena del circo. Te echaba de menos.

Anónimo dijo...

ES curioso que en España miles de parejas salgan a por "hijos del corazón" al extranjero y que aquí se suprima la vida humana en formación simplemente por una irresponsabilidad de nuestras jóvenes madres que empujadas por la dinámica del blog abortista apuestan por quitarse un problema. Solución a corto plazo, secuelas a medio y largo plazo. Creo que el gobierno incita a nuestros jóvenes a practicar la sexualidad de modo irresponsable sin asumir las consecuencias de sus actos. Se implanta una cultura de la permisividad. Como decía Maquiavelo "todo vale por la razón de Estado". La Iglesia, ambigua en otras cuestiones, no debe permanecer impasible y exigir coherencia a las cofradías y retomar un papel de conciencia moral de los creyentes. Me explico. La Iglesia como institución no tiene peso político (teórico) ninguno, al igual que la prensa, los sindicatos, etc.... Creo que hace bien en definirse y obligar a hacerlo a aquellos que se consideren miembros de su Iglesia. No es una institución ajena a los tiempos. Han tenido que retocar algunas de sus propuestas. No es un calcetín donde todo vale, donde todo es discutible y opinable. Eso si el que la acepta como es, está en ella y el que no debería salirse o fundar otra Iglesia. Veo positivo que la Iglesia apueste por la calidad de sus fieles, que se posicione pues como institución tiene el derecho de hacerlo y exigirle a sus fieles que lo hagan. En otras cuestiones no estoy tan de acuerdo por lo sugerido por la institución como el acaparamiento de riqueza, la ambigüedad de las nulidades matrimoniales, la ostentación de las cofradías, la pasividad ante el terrorismo de estado en algunos países, la educación para la ciudadanía...Veo correcto que así se posicionen. Quien abrió la guerra abortista fue el PSOE cuando subió al gobierno y cierto es que el papel del PP ha sido cobarde, como con la LOGSE, ley perversa donde las haya, pero eso es otro tema

Fernando Alvarez Jurado dijo...

En primer lugar le doy la bienvenida a Miguel. Creo que con su presencia este blog gana en calidad literaria y en profundidad de ideas. Comparto gran parte de lo que has expuesto, Miguel. En efecto, Zapatero es un experto en crear problemas donde no los hay. Con un país a la deriva, con más de cuatro millones de parados y un sistema educativo desastroso, lo único que le queda es sacar de la chistera su discurso radical que busca enfrentar a la sociedad rompiendo los grandes consensos sociales.
Alfonso, de nuevo no puedo estar más en desacuerdo con tus comentarios. En primer lugar, la Iglesia recauda lo que voluntariamente sus fieles le conceden mediante la casilla de la declaración de la Renta. Por cierto, silencias lo que el Estado se ahorra con la labor asistencial de la Iglesia que en muchos casos actúa como subsidiaria e incluso presta una labor social donde nunca llega el Estado.
En cuanto a tus jocosos comentarios sobre el aborto, he de decirte que no me hacen ninguna gracia. No creo que el tema sea para frivolzar de esa forma cuando dices "La verdad es que hubiera agradecido, sabida mi afición al gore, un feto sanguinolento a un niño rozagante, hubiera sido más impactante, pero en fin doctores tiene la iglesia, y nunca mejor dicho".Tampoco me han hecho nunca gracia los chistes sobre el holocausto judío.
Por otra parte, creo de mal gusto tus palabras sobre un hipotético cartel en el que un obisto llevaría "arrastrando esposada a una mujer hasta la cárcel". Que yo sepa en treinta años de democracia ninguna mujer ha ido a la cárcel. Además si una institución está realmente ayudando a la mujer es la Iglesia con la creación de la Red Madre que en momentos difíciles para la mujer supone un importante apoyo moral y psicológico. Así es que, por favor, un poco de seriedad y rigor en los comentarios.

Anónimo dijo...

Habla Alfonso: Estimado Fernando:la iglesia debería recaudar como lo hacen otras congregaciones, es decir, directamente de sus fieles, me resulta inaudito que el Estado Español ponga toda su infraestructura burocrática al servicio recaudatorio de una institución privada bajo control, además, de un estado extranjero como es el Vaticano. Y si ha aumentado la recaudación eclesial esta última campaña de la renta ha sido por el cambio del sistema que ha permitido el aumento del porcentaje, graciosamente otorgado por Zapatero, por cada cruz en la famosa casilla. Es uno más de los privilegios de que goza la iglesia en España, aunque luego algunos digan que está perseguida y es una mártir. Por cierto que ese dinero que se recauda a traves del irpf va fundamentalmente a sufragar los gastos del personal eclesiástico y sus necesidades, ya que instituciones tan laudables como cáritas reciben el dinero precisamente de los que ponemos la cruz en la casilla de otros fines de interés social. Por otro lado y respecto a mi comentario de "fetos sanguinolentos" no me hago sino eco de los muchos correos de grupos provida que circulan por la red con imágenes de ese tipo, que por cierto, me parecen mucho más ajustados a lo que se quiere denunciar, usar la foto de un infante sonriente me parece manipulador y falsario. Además no es cierto que no haya habido mujeres en la cárcel por abortar, las hubo, así como médicos, de hecho la legislación en tiempos de Felipe González trataba de evitar eso y es lo que la campaña de los obispos parece pretender de nuevo. Por último te agradecería que no repartieras carnets de buen gusto y de rigor, para mí algunos de tus comentarios también están faltos de él y me limito a discrepar de ellos sin atreverme a pontificar. Por cierto, la seriedad no está reñida con el sentido del humor, una película como "La vida es bella" demostraba que aún las más terribles situaciones pueden tener una mirada irónica lo que no resta un ápice de mordacidad a la crítica que se haga. Un saludo cordial.

Anónimo dijo...

Saludos a todos.
A tenor de las reacciones enfrentadas a partir de las dos últimas entradas (víctimas del terrorismo y campaña contra el aborto) no hay duda de que este blog se adentra en temas cada vez más apasionantes, reviviendo polémicas que tienen todo el aspecto de ser eternas (ni nuestra generación ni la anterior fueran las primeras en discutir sobre atención a las víctimas o el aborto). Encuentro muy saludables estas controversias, es más, creo que no hay debate digno de tal nombre si no puede albergarlas, pues el carecer de controversia (con bromas de mal gusto o no, ése es otro tema) lo asemejaría más bien a un banco de peces: todos yendo en la misma dirección y al mismo tiempo. Creo que las polémicas intervenciones de Alfonso han sido tan imprescindibles para insuflar vida a estos debates como la elección de los temas por parte de Fernando Álvarez.
Ahora bien, como en toda discusión existe el riesgo de que alguien se agarre sólo a un fleco de la exposición original y traslade el debate a dicho asunto tangencial. Fernando dedicaba su entrada a la Semana Santa por la vida, y creo que todos los participantes nos hemos puesto a discutir otras cosas. En fin, "mea culpa".
De manera que, recuperando la intención original del autor del blog, tengo que hacerme eco de cómo se ha desinflado la iniciativa a partir de la cobarde reacción de las hermandades de Sevilla capital. Estoy convencido, por lo poco que conozco de este mundo, de que su decisión tendrá un efecto contagioso en muchas otras capitales andaluzas, donde aún seguimos con el complejo de niño cabezón: criticamos a los de la capital por creerse superiores, pero a continuación aguardamos a ver su reacción para imitarla en mayor o menor grado... como si los creyéramos superiores.
La iglesia católica actúa de forma coherente al pedir, al menos por una vez, que quienes forman parte de las cofradías de Semana Santa actúen de forma coherente con esa fe que debiera inspirarles al participar en las hermandades (imagino que durante todo el año, y no sólo durante la época que más lucen en su ciudad o pueblo). No creo, sin embargo, que den la talla, como no la ha dado la Semana Santa sevillana, pero, sea cual sea la reacción de la iglesia en este asunto, creo que es un buen punto de partida para exigir responsabilidades, recordar a las hermandades que la Semana Santa es algo más que procesiones, y recordarles, si es necesario, que fue la sociedad civil la que se sumó a las procesiones religiosas, no la que las organizó desde un principio.
Estoy convencido de que la situación debe ser aún más grave, y más chusca, en los pueblos, donde creo que es frecuente ver a los políticos locales del PSOE e incluso de IU en juntas de gobierno aunque sean en algunos casos ateos declarados, pero creen que tienen que estar ahí porque son días grandes para el pueblo (como una verbena, vamos) y porque ha habido alguien de su familia en la junta de gobierno de la cofradía desde los tiempos de su tatarabuelo. Es decir, un esperpento tal que no lo dignificaría ni un guión de Rafael Azcona.

Fernando Alvarez Jurado dijo...

Alfonso, cuando dices "me resulta inaudito que el Estado Español ponga toda su infraestructura burocrática al servicio recaudatorio de una institución privada" me imagino que también estás pensando en sindicatos y partidos políticos los cuales, por cierto, ni siquiero tenemos los contribuyentes la posibilidad que se nos da con la Iglesia de marcar la casilla en la declaración de la Renta. Insisito, es más lo que la Iglesia aporta al estado que lo que el Estado, como intermediario de la sociedad, da a la Iglesia. Si quieres en próximos correos te detallo la cuantía con exactitud.
Me sorprende, Alfonso, como muchos de los que pertenecéis a la izquierda consideráis que todos aquellos que no comulgamos con los valores dominantes que intentáis imponer a la sociedad, instalados como estáis en una pretendida superioridad moral, no hacemos otra cosa que "pontificar". Me reafirmo en lo dicho. Tu comentario anterior me parece de un pésimo gusto, nada respetuoso con la vida del no nacido, del que por cierto nada dices en tus intervenciones. Además poner como ejemplo "La vida es bella" creo que no viene a cuento, o ¿acaso tú contemplas el drama del aborto desde la mirada de un niño?
Por supuesto que pensar que la Iglesia quiere llevar a la cárcel a las mujeres no tiene rigor. Te repito, ¿conoces la Red Madre? el aborto es un crimen y hacer política con este tema no quien defiende la vida sino quien la critica.

Anónimo dijo...

Estimado Fernando: soy Alfonso, aunque nadie marcara la famosa casilla de la declaración de la renta el injusto concordato que rige las relaciones de España con el Estado Vaticano determinaría que el Estado Español tuviera que sufragar todas sus necesidades, no te engañes no hay opción, de hecho en anteriores campañas de la renta, si no bastaba lo recaudado a través de la casilla, el estado subvenía las necesidades burocráticas del clero. Y por supuesto que comparto la necesidad de que tanto partidos politicos como sindicatos se mantengan con las cuotas de sus afiliados, es justamente lo que pido para la iglesia, que sus afiliados paguen una cuota, como el que es socio de un gimnasio o un club de futbol. Me hace mucha gracia eso "de los que no comulgamos con los valores dominantes", entonces cuando gobernaba aznar supongo que los rebeldes, los no comulgantes eran otros, me hace gracia ese tono de impostada rebeldía, con aires de martirologio, que se aprecia en cierta derecha, "nosotros somos los rebeldes, los que vamos contracorriente, tenemos mucho mérito",no sé tú, pero yo no me engaño, mi rebeldía siempre ha sido de salón y cuando me parto la caja es cuando dices que yo pretendo imponer algo a la sociedad, yo soy partidario del vive y deja vivir, de que cada uno lleve los lazos, pines, chapas, insignias o escapularios que le dé la gana. Aquí la que siempre ha intentado imponer su forma de ver la vida, su presunta superioridad moral, ha sido la religión católica, siglos de represión y gazmonería a nuestras espaldas lo demuestran. Por último y respecto al aborto vuelves a no contestarme, si la iglesia condena como crimen el aborto digo yo que pretenderá que tenga una punición legal, que digan de una puñetera vez los años de carcel que quieren, que vayan hasta el fondo, que se pronuncien y se dejen de medias palabras. Respecto, para terminar, a mi famoso comentario del "feto sanguinolento" recuerdo siempre lo que dice mi madre, el libro de los gustos está abierto, pero acabo de oir en la radio una noticia que no hace sino confirmar la rigurosidad y pertinencia de mi alusión. En el colegio de las adoratrices de Logroño, no hace falta decir que es privado y religioso ¿verdad? han proyectado a niños una película donde se alterna, en plano/contraplano, imágines de fetos despedazados y sanguinolentos junto a caretos de gerifaltes del psoe, dentro del horario de educación para la ciudadanía, me creo ahora capacitado para desentrañar la campaña eclesial, hay una versión A, apta para adultos, la del lince y el niño rozagante, y una versión B, sólo apta para menores, con fetos despedazados y sanguinolentos, espero que hagas llegar a dicho colegio tu opinión de que tan edificante producción es de pésimo gusto. Yo, como humilde cinéfilo que soy, y visto que han iniciado un ciclo de cine gore para niños les propongo que continuen con clásicos del género como "Mal gusto" o "Tu madre se ha comido a mi perro". Y sí ya acabo y te contesto, para mí, y también para el derecho civil español, el nasciturus no es igual a un nacido, otro gente cree que un zigoto es igual que un rozagante niño de un año y están dispuestos a obligar a una mujer a parir contra su voluntad, es curioso que siempre sean hombre los que manden en la iglesia, una papisa ya. Un saludo cordial, ah, y gracias a Miguel por su entrada de tono contemporizador.

Anónimo dijo...

Saludos a todos.
José Luis Balbín siempre ha dicho que no organizó en "La clave" un debate sobre el aborto porque hallaba que las posiciones eran tan enconadas que sería imposible que acercaran posturas, y no digamos ya que partidarios de una convencieran a los de la otra. En los comentarios a esta entrada ocurre eso mismo, hasta el extremo de que he sido el único que alguna vez se ha ceñido al tema de la misma, relativa a las manifestaciones previstas para la Semana Santa, mientras la discusión se desbocaba por múltiples derroteros.
Los dos concordatos más recientes con la Santa Sede, suscritos por gobiernos de Franco en los años cuarenta y de Suárez al principio de la transición, tenían como uno de sus objetivos fundamentales el remendar la absoluta orfandad española en cuanto a aliados internacionales (tras la II Guerra Mundial creo que sólo reconocían al régimen del general Franco, además del Vaticano, el Portugal de Salazar, la Argentina de Perón y la Irlanda de Eamon De Valera, ¡toma ya!), y en época de Suárez también se creyó imprescindible el respaldo internacional de un microestado como la Santa Sede que, sin embargo, dispone de una diplomacia influyente en la órbita occidental. Es decir, los acuerdos con el Vaticano, como con cualquier otra nación, suponían un intercambio de obligaciones y/o prestaciones, aunque hoy éstas nos parezcan intangibles u obsoletas. Conviene recordarlo ahora que la nueva torpeza de Carme Chacón nos ha vuelto a dejar mal ante los pocos aliados que nos van quedando.
Alfonso parece sugerir que la reforma no se puede paralizar ni tampoco cambiar la ley sino se detallan con carácter previo las penas que se proponen. Los parientes de chiquillas asesinadas llevan décadas haciendo eso sin que les presten ni puto caso. Por otra parte, teniendo en cuenta lo que cobran, algo deberían hacer nuestros legisladores y el ejecutivo, porque bastó el descubrimiento de una clínica en Barcelona donde, presuntamente, se perpetraban abortos ilegales, para que oyéramos todo tipo de reparos a aplicar la ley: no se podía traumatizar a las mujeres (¡con un interrogatorio!), nadie se daba prisa en investigar qué personal clínico o administrativo derivaba (de ser cierto) a mujeres en avanzado estado de gestación a dicha clínica concertada, sólo se oían voces de disculpa hacia los médicos de la clínica y los psicólogos que con sus informes facultaban la práctica de los abortos (y el suculento cobro de los mismos, a menudo a través del Estado, ese impresentable que entrega dinero a la iglesia católica)... Como colofón, el gobierno se lanza a ampliar los supuestos legalizados del aborto.
¿Para qué exigir a los contrarios al aborto que sean precisos con las penas de cárcel, si quienes tienen que fijarlas o hacerlas cumplir se limitan a refunfuñar ante la perspectiva de trabajar? ¿Si otros colectivos, como víctimas del terrorismo o padres de jóvenes asesinadas, piden la reforma de las leyes y proponen una alternativa a las penas actuales, significa que el ejecutivo y el legislativo deberían obedecerles?

Fernando Alvarez Jurado dijo...

La verdad es que es difícil discutir con quien está instalado en un rancio laicismo decimonónimco con ribetes frentepopulistas e incendiarios. Mira, Alfonso, creo que lo tuyo con la Iglesia católica es obsesivo y así no es fácil argumentar con criterios racionales. Tus visión de la realidad me da la impresión que está condicionada por unas anteojeras ideológicas ancestrales. Insisto en lo dicho en mensajes anteriores, creo que las frivolización con el tema del aborto, que sigues haciendo, es de mal gusto y por supuesto irrespetuoso con la vida humana, ¿o también crees que el feto no es vida humana?
Totalmente de acuerdo con Miguel en su apreciación de que el debate sobre el tema inicial, la decisión de las Cofradías, ha derivado en una carificadora, por otra parte, polémica sobre el aborto, pero no he sio yo quien lo ha llevado a este terreno. Saludos.

Anónimo dijo...

Estimado Fernando: soy Alfonso y me encanta tu frase "rancio laicismo decimonónico", que honor para mí que retrotraigas mis humildes cavilaciones a gente de la talla de Ferrer Guardia, por cierto fusilado en las fosos de Montjuich por el contubernio del trono y el altar, y qué mas prosapia que unas mis escasas fuerzas a los afanes crematorios del frente popular, aunque si me conocieras un poco sabrías que odio la violencia, además los españoles que durante muchos siglos fueron torturados hasta la muerte en la hoguera por distintas inquisiciones lo fueron por culpa de los antecesores de nuestra actual jerarquia católica. Afortunadamente hoy día ya no es así, aunque algunos parezcan sentir nostalgia de otros tiempos. Por cierto, cuando no se tienen argumentos lo más sencillo es descalificar a quien te contradice, es como si yo ahora te llamara nostálgico del franquismo bajo palio, pero tranquilo no lo voy a hacer. Un saludo cordial

Fernando Alvarez Jurado dijo...

Una vez más tus palabras retratan a la perfección tu sectarismo ideológico. Yo no te he descalificado, tú mismo consideras mis palabras un honor. El laicismo militante es igual que el fanatismo religioso. Ninguno cree en la libertad, ni de conciencia ni de creen cias. La alusiones al franquismo, repito, una vez más te retratan. ¿Otra obsesión?

Anónimo dijo...

Estimado Fernando: no hace falta decir que soy Alfonso, pensaba que estabas más capacitado para captar la ironía, además aquí el único que ha sacado a colación las cremaciones y los frentespopulares de la República has sido tú, vuelves a descalificarme llamándome fanático y sectario dejando bien a las claras, por si aún hacía falta, tu absoluta falta de argumentos. En fin, parece que estabas demasiado acostumbrado en tu blog a la aquiescencia generalizada. Un saludo cordial

Anónimo dijo...

Un saludo a todos... o a los que queden.
He tardado en intervenir porque he salido a buscarme un chaleco antibalas, pero he comprendido a tiempo que aquí no se están usando proyectiles, sino la máquina del tiempo: "rancio laicismo decimonónico", "franquismo bajo palio", "frentepopulismo incendiario", "inquisición torturadora en la hoguera de miles de personas"... Todo esto me produce una impresión como si quisiérais discutir sobre la crisis de la narrativa actual pero os despellejárais a propósito de Homero.
A riesgo de parecer un melindres, me gustaría partir de un punto de vista más cercano que el de Ferrer Guardia o el de Torquemada. Quizá sería una buena idea recuperar el motivo de la entrada original, o, incluso, plantear un debate más exhaustivo, ese que, diga lo que diga el PSOE, siempre hurtó a la sociedad cuando aprobó la despenalización parcial primero, cuando la amplió años después con un nuevo supuesto, y cuando, en estas semanas, sondea al pueblo acerca de una ley de plazos apenas disimulada, pero, eso sí, que defiende escudándose en un comité de expertos que han acumulado toda su experiencia personal e incluso profesional reivindicando y practicando abortos.
Ya imagino que a casi todos los participantes les parecerá una discusión escolar pasada de moda, a fin de cuentas ya en los años ochenta escuchábamos casi los mismos argumentos que hoy, pero la actual recuperación de esta polémica permite discernir aspectos que entonces nos eran desconocidos: el descubrimiento de que hay identidad genética desde la fecundación, el conocimiento de que el embrión en no sé cuán pocas semanas es capaz de experimentar sensaciones, el oportunismo de cualquier gobierno que aprovecha los ejemplos más desesperados para promulgar una ley que cobije a muchos otros, la legitimidad de la crítica si la ejercen ciertas instituciones (pero no todas)...
En fin, no estoy muy seguro de si estas letras resultarán un nuevo estímulo o serán el epitafio de esta entrada, en plan "lo que pudo haber sido y no fue". Por mi parte, vuelvo a mi trinchera, no sea que el chistoso del gore y el que no admite bromas la tomen ahora conmigo. No me molestaría recibir invectivas, pero el del gore es capaz de presentarse en casa con una motosierra

Fernando Alvarez Jurado dijo...

Doy por concluida la polémica. Creo que las posturas han quedado claras y los lectores del blog podrán sacar sus conclusiones. Me remito a mi blog La Tercera España al que se puede acceder desde este blog para que quien quiera pueda comprobar que lejos de estar en una trinchera siempre he defendido y defenderé el diálogo desde las posturas racionales que favorezcan el entendimiento. Saludos y hasta otra entrada

alfonso dijo...

Yo también doy la polémica por conclusa, y por lo que a mi respecta igualmente las sucesivas. Me temo que cualquier idea que expusiera alejada del sentir de nuestro anfitrión sería anatemizada como propia de un sectario y un fanático. Por mí este blog puede seguir cómodamente instalado en el “nemine discrepante”. Un saludo cordial y hasta siempre.

Fernando Alvarez Jurado dijo...

Tús verás, Alfonso. Es curioso que precisamente quien desde su primer comentarios ha usado un tono poco respetuoso no sólo con los artículos publicados sino también con algunos de los que realizan habitualmente comentarios se sienta tan dolido e indignado. Es sin duda una seña de indentidad de la izquierda progre el hacerse la víctima cuando encuentra a alguien que no comulga con el discurso de valores dominante.
Mira, Alfonso, este blog no apoya opción política alguna, ni por supuesto ideológica, nace en defensa de valores como la vida, la dignidad de las víctimas del terrorismo, la democracia, la libertad y la Nación española. De hecho podrá entradas críticas con el PSOE y también con el PP. No pretenderás que con toda la ironía y sarcasmo de la que haces gala, se te responda con mansedumbre. La izquierda está acostumbrada en España a erigirse como la única opción que tiene el derecho al uso de las palabras gruesas en discursos duros. No hay más que ver cómo el inefable Iñaki Gabilondo se ha dedicado durante años a soltar barbaridades desde la emisora de Prisa y resulta que cuando un comunicador le contesta con la misma moneda, me refiero a Jiménez Losantos, los medios progres se rasgan las vestiduras y tildan a este de radical. Ya va siendo hora de que los que no comulgamos con los valores de la progresía tengamos un discurso firme en la defensa de lo que creemos. Pero eso no lo aguantáis, ¿verdad?. Por último, una matización. Yo no te he llamado fanático, sino sectario y me reafirmo en ello. Creo que una definición exacta de tu postura ideológica, en absoluto una descalificación personal. Todo lo contrario. Desde hace años te conozco y tengo un afecto personal por ti, que no oculto. Una cosa es la discrepancia política y otra la relación personal. Parece que aún en España, esto no se direfencia. La sombra de la guerra civil es, por desgracia, aún muy alargada. Tuya es la decisióm. Por mi parte te invito a que sigas exponiendo tus argumentos en este foro de libertad. Un fuerte abrazo.

Anónimo dijo...

Estimado Fernando: tengo delante de mí la definición de sectario: “que profesa y sigue la doctrina de una secta, secuaz, fanático e intransigente de un partido e idea”. Por lo pronto podrías conocer mejor la definición de las palabras que utilizas. Y no me busques en tu libro de cabecera: “Taxonomía del estúpido progre español”, prologado por tu adorado Federico. Repito algunos de mis comentarios del blog: desde mi primera intervención, en absoluto irrespetuosa, dije que llegado el caso no me importaría asistir a una convocatoria de la Avt, que no compartía las críticas a los lazos blancos porque cada uno es libre de portar los pines o tatuajes que le dé la gana dentro de los marcos legales vigentes, que condeno la dictadura cubana, que condeno los gal y que no me gustan las injerencias del poder político en el ejecutivo y aún así tienes la desfachatez de llamarme sectario o sea, fanático. Por mí puedes seguir cultivando tu halo de luchador contra lo “políticamente correcto”, comparable al “malditismo” perseguido por algunos poetas de segunda. Además aquí el único que ha sacado a colación el guerracivilismo ha sido tú que pareces imaginarme con la bencina en la mano dispuesto a quemar la iglesia de mi barrio. Por lo demás sigo pensando en la razón que tiene el famoso aserto: ver la paja en el ojo ajeno y no ver la viga en el propio. Por cierto, me desdigo en mi afirmación de tu incapacidad para la ironía y el sarcasmo decir que tu blog no tiene ideología lo demuestra. Te deseo lo mejor en lo personal y te devuelvo el aprecio que me manifiestas. Un saludo cordial de parte de Alfonso y ahora sí hasta siempre.

Anónimo dijo...

Postdata: cuando he dicho injerencias del poder político en el ejecutivo quería decir, claro, el el poder judicial, perdon.